«10 mil pesos para hacerse socio de la Casa de Auxilio de Ramos Mejía, menos que una hamburguesa de McDonald’s».


Diálogamos con Arturo Ter Akopian sobre el funcionamiento de la centenaria Casa de Auxilio de Ramos Mejía, la cual preside desde hace 30 años. Además, mencionó sus ideales políticos en contraposición con los del Pte. Milei.

AiE: Arturo, ¿Cómo funciona la Casa de Auxilio?

A.Ter Akopían: «Tenemos en la idea que los sistemas de salud son: el Estado, que es gratuito, y las obras sociales, ya que, a través de la quita que te aplican en el salario, tenés una cobertura; en teoría, no pagás nada. Luego están los prepagos, en los cuales pagás un monto y, posteriormente, contás con todos los servicios cuando los necesitás. Nosotros no somos ni el Estado, ni una obra social, ni un prepago; acá se pagan las consultas y los estudios, pero en menor proporción. Todos se quejan porque no hay turnos (en los otros sistemas), pero acá siempre tenés turno. Acá encontrás al profesional.»

AiE: ¿A qué se debe esto?

A. Ter Akopían: «Porque, con el valor de las consultas que abonás (12 mil para los no socios y 8 mil para los socios), el médico se lleva el 50 % el mismo día. Esto genera que el profesional trabaje a demanda y, obviamente, obtenga un mayor ingreso. Es positivo, ya que en una obra social al médico le pagan tarde, mal o nunca; en el prepago sucede lo mismo, y en el Estado está todo mal. Acá te asocias por $10 mil pesos, menos que una hamburguesa de de McDonald’s. Vale destacar que, al pagar la cuota social mayor, de $50tenés un seguro con la federación patronal. Se ha pensado ese monto en función de los costos de una internación en un sanatorio mediano. Ejemplo: si estás internado 3 días, federación patronal te va a indemnizar con montos considerables, aproximadamente 500 mil por día. Esto es nuevo.»

AiE: ¿Tiene muchos afiliados?

A. Ter Akopían: «Aproximadamente 3.700.»

AiE¿Tiene expectativas de abrir otra Casa de Auxilio?

A. Ter Akopían: Por ahora, lo único que te puedo decir es que señamos una propiedad con el fin de comprarla para poder reubicar la salud mental allí, ya que hay 24 psicólogos y más de 60 médicos.

AIE: Hay mucha demanda, entonces…

A. Ter Akopian: «Contamos con especialistas con más de 30 años de experiencia y, acá, es accesible; en cualquier otro lugar, cuesta más. Nosotros somos nuestros propios financiadores y estamos en condiciones de contratar prestadores. También contamos con equipos. Actuamos como un club de fútbol; somos una entidad de bien público. Aunque somos privados, tenemos como objeto el bien público. Los fundadores, allá, hace 100 años, lo pensaron así: ante la ausencia del Estado, crearon este sistema, y nosotros, hace 30 años, tomamos el toro por las astas. El mérito de todo esto es que somos pocos y la dirigencia trabaja gratis. Yo soy arquitecto (tengo inmobiliaria) y vivo de ello. Los empleados, obviamente, tienen un sueldo.»

AIE: ¿Puede abarcar la demanda?

Ter Akopian: «Siendo tan pocos y sin tener ayuda de nadie, hacemos lo que podemos. Pero el sistema funciona, y el vecino debería verlo e involucrarse para gestionar su salud. Abarcar lo público para nosotros es una utopía, pero hacemos ruido.

AIE: ¿Cómo sería este sistema trasladado al municipio?

A. Ter Akopian: «Creo que la corrupción nos corrompe como sociedad. Nuestro milagro es que, siendo pocos, somos transparentes. Acá no hay secretos; los tratos se hacen a cara descubierta, con recibo. No hay “mesa chica” ni acuerdos ocultos. Hoy tenemos un presidente con problemas psiquiátricos, y la gente se ha decidido a suicidarse. No se da cuenta, y hay complicidad de los grandes medios y sectores de la política, porque están haciendo sus negocios personales. Es muy difícil romper toda estructura de corrupción institucionalizada.»

AIE: ¿Cree usted que, cuando transitó en la campaña de Patricia Cubría y, en caso de llegar a ser funcionario público, podría romper con esa corrupción?

A. Ter Akopían: «Quiero creer, como acto de fe, que iba a funcionar. Como socialista que soy, me conmueven las personas que se acercan a los humildes; por eso siempre estuve cerca de los movimientos sociales. Podremos discutir si las cosas se podían hacer mejor o no, pero está claro que estamos del lado de la solidaridad y no del discurso de la libertad del rico para ser más rico.»

AIE: ¿Cree usted en esta meritocracia que predica el Pte Milei?

A. Ter Akopían: «Te voy a decir una frase de Juan B. Justo: “El obrero argentino debe leer a Smith, porque al mercado hay que respetarlo; debe leer a David Ricardo, porque los proteccionismos a la larga son malos; y a Marx, porque la lucha de clases existirá siempre.”

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